El pobre empate inicial como resultado final de la UD Las Palmas ante el CD Lugo aleja el equipo de la pelea por el ascenso directo. Aunque aún queda en juego puntaje suficiente, la lógica invita a pensar que la dinámica amarilla es incapaz de recortar distancias con el ritmo que están marcando ahora mismo tanto Eíbar como Deportivo.
Hay síntomas de mejoría en el conjunto de Sergio Lobera, un equipo que ha recuperado la consistencia defensiva, ha fortalecido su manido planteamiento táctico del 4-2-3-1 aportando más verticalidad y movilidad en la punta de ataque. Pero sigue siendo un planteamiento fallido cuando se necesitan de prácticamente infinitas oportunidades para obtener un bagaje goleador bien escaso. El gol, ese mal del del que adolece la UD durante toda la temporada, es la gran losa que está frenando al equipo.
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| Asdrúbal en la brega, ©LaVozdeGalicia |
En la previa del partido se hacía hincapié en la batalla que se disputaría en la medular del campo entre dos conjuntos que gustan del buen trato al balón con declinación por las jugadas elaboradas por encima de un fútbol más directo. Las Palmas, con breves periodos de receso ante al empuje gallego, fue la dominadora del partido gracias al control y posesión del balón. Con una alta predisposición para evitar el ataque estático, que en otros encuentros les colapsa, los jugadores amarillos se mostraron muy activos buscando resquicios en la defensa rival y ofreciéndose entre líneas. Destacar la capacidad de Momo de acompañar las jugadas partiendo de la cal derecha para ir asociándose mientras se desplazaba prácticamente por todo el frente de ataque. Valerón trazaba esos pases con escuadra y cartabón que tan sólo él ve a los jugadores que se ofrecían con desmarques en diagonal como Asdrúbal o las incorporaciones de los laterales. Incluso Apoño se mostró más animoso que de costumbre para acercarse al balcón del área, gracias al magnífico partido de Javi Castellano que se convirtió, con su colocación y su eficiencia defensiva, en el auténtico capo del círculo central.
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| Valerón se lamenta, ©Canarias7.es |
Pero seguía faltando la guinda de un pastel que provocó que al descanso los jugadores amarillos se fueran a la caseta aplaudidos en reconocimiento del buen fútbol mostrado pesando más que el desánimo por tantas ocasiones fallidas. Quique Setién, perro viejo en esto del fútbol, supo leer las carencias de su equipo y realizó un doble cambio que provocó un cambio temporal en el choque que no supieron aprovechar cuando disfrutaron de alguna clara ocasión. Por su parte Lobera arremetió con un doble cambio (que fueron los definitivos) para agitar la coctelera ofensiva, cambió a un irregular Tana (dejó detalles, ganas y poco más) y a Javi Castellano (sustitución que provocó incredulidad en la grada) por Aranda y Nauzet Alemán.
Si bien las intenciones del técnico aragonés era ir a por la victoria, tan sólo Aranda provocó los efectos buscados. Con su controvertida figura el delantero malagueño está demostrando que aporta variantes que desequilibran la balanza a favor de los intereses amarillos, y si bien su olfato goleador está ausente, su capacidad para generar peligro gracias a su facilidad asociativa es un recurso a tener muy en cuenta. Esa asistencias que inventa Aranda buscan al delantero centro que la UD no pone sobre el campo, Asdrúbal tiene movilidad, intensidad y ganas, pero su rol y sus características son otras. Mojada o no, la dinamita de la UD no salta al campo. Con un perfil más asociativo que goleador, Aranda podría sacar mayor provecho de sus acciones su tuviera otro delantero como Máyor, Figueroa o Chrisantus.
Si bien las intenciones del técnico aragonés era ir a por la victoria, tan sólo Aranda provocó los efectos buscados. Con su controvertida figura el delantero malagueño está demostrando que aporta variantes que desequilibran la balanza a favor de los intereses amarillos, y si bien su olfato goleador está ausente, su capacidad para generar peligro gracias a su facilidad asociativa es un recurso a tener muy en cuenta. Esa asistencias que inventa Aranda buscan al delantero centro que la UD no pone sobre el campo, Asdrúbal tiene movilidad, intensidad y ganas, pero su rol y sus características son otras. Mojada o no, la dinamita de la UD no salta al campo. Con un perfil más asociativo que goleador, Aranda podría sacar mayor provecho de sus acciones su tuviera otro delantero como Máyor, Figueroa o Chrisantus.
El partido acabó con la indignación con un árbitro que se mostró parcial, con una actuación fallida que incluso no pitó un claro penal por mano clamorosa en área gallega. Los aplausos del descanso se tornaron en pitos y abucheos a repartir entre todos de una afición que se muestra hastiada de la inoperancia amarilla. La UD es una promesa que siempre avisa de su vuelta, pero que nunca llega.
Enroscado en su particular divorcio con el gol, mientras en el reloj de arena del ascenso directo cada vez queda menos arena por caer, se le va la vida al conjunto amarillo. Pasan las jornadas y las victorias son escasas, sufridas y con tintes épicos que no invitan a pensar en grandes gestas salvo milagro. La mejoría mostrada es insuficiente para aspirar a la mayor cota sino se consigue materializar el caudal ingente de ocasiones que se disfruta partido tras partido. Poco a poco se va materializando la promoción como el objetivo a conseguir para buscar el tan ansiado ascenso por la vía indirecta.
Como siempre les facilitamos el resumen del partido, con la rueda de prensa de Sergio Lobera y la galería fotográfica con las mejores instantáneas del partido.
©As.com
©GolTV
