Muy atrás parece quedar el 22J, pero sólo ha transcurrido poco más de dos meses. Un tiempo donde la UD y su entorno ha pasado de
las más profunda de las desolaciones, de la más sonrojante de las vergüenzas a
generar nuevamente, con esfuerzo y sacrificio, nuevos motivos para sentirse
orgulloso surgiendo una ilusión más apegada a la pertenencia al escudo que a
las nuevas incorporaciones, que también.
Este dato ha quedado claramente reflejado en el número de
abonos que ha cursado hasta ahora la UD Las
Palmas, cerca de 13.000, que han superado en más de 3.000 los que se
tramitaron la pasada campaña. La UD Las Palmas
y su entorno ha sido capaz de transformar una daga clavada en el corazón, en un
bastón donde apoyarse, levantarse y volver a mirar de frente.
La asistencia de aficionados como de medios han sido en
ocasiones abrumadoras, tanto en los entrenamientos como en los amistosos
estivales. Desde los 5.000 fieles en el Municipal de Maspalomas, pasando por los
casi 6.000 ante el Marítimo portugués o los más de 12.000 en la
Copa Mahou ante el CD Tenerife.
Sólo el litigio del Real Murcia con la LFP hacía cernir algunos
nubarrones sobre el inicio liguero. Ahora que este proceso judicial se
encuentra en punto muerto a la espera de las próximas acciones que lleva a cabo
el club pimentonero, se abren de nuevos las verdes praderas del fútbol nacional
a sus protagonistas.
Las Palmas comienza la reconquista de la plaza en 1ª
división que perdió en el último suspiro ante el Llagostera, club singular con
muchos datos curiosos de los que damos cuenta en nuestra web en los artículos
de la previa (aquí, aquí y aquí también). Saquen del armario sus camisetas, nuevas o añejas, preparen sus
bufandas, calienten sus gargantas, el balón comienza a rodar, se viene la Unión Deportiva , se viene la
alegría.