Por @LPArbitrofutbol (perfil de Twitter dedicado al arbitraje)
El cuarteto arbitral encargado de dirigir el enfrentamiento entre la UD Las Palmas y el
Atlético Madrid sería por completo del Comité Territorial Vasco. El árbitro
principal designado fue el joven Iñaki Vicandi Garrido, asistidido en las
bandas por Huerga Cermeño y Villatea Martinez y con Rezola Etxeberria como
cuarto árbitro. Vicandi Garrido es un árbitro muy peculiar por su apariencia
física (1,92 de altura) y sus gestos. Es el máximo candidato español a ser
internacional el próximo año a pesar de ser el segundo árbitro más joven de la
categoría.
Antes que nada, nos gustaría resaltar que la mayoría de
estos análisis arbitrales se fundamentan en lo visto en el propio partido, ya
se por la televisión o en directo, y por algunas repeticiones que podemos ver
en algunos programas de televisión donde se debaten jugadas. De resto, es muy
difícil encontrar resúmenes donde aparezcan todas las jugadas “polémicas” de
cada encuentro de la UD Las Palmas. Si alguien lo sabe agradecería mucho su
ayuda.
Los tres aspectos que voy a tratar sobre el arbitraje de
Vicandi Garrido son: el “listón” en las tarjetas, el posible fuera de juego en
el segundo gol colchonero y las dos jugadas dudosas dentro del área del equipo
madrileño.
Con respeto a las sanciones disciplinarias mostradas por
Vicandi Garrido, considero que su “permisividad” a la hora de mostrar amarillas
ha estado a la par con la línea en la que se esta trabajando este año en España.
Una vez más, la gran mayoría de los aficionados que se encontraban en el estadio
de Gran Canaria no estaban de acuerdo con su “listón”. ¿Qué pudo sacar alguna
amarilla más a algún colchonero, especialmente en la primera parte? Pues puede
ser, pero eso ya es cuestión de interpretaciones. La única tarjeta de
reglamento clara que debió mostrar y no lo hizo fue una mano en el min. 54 de
un jugador del Atlético de Madrid que corta un pase entre dos jugadores de Las
Palmas.
Las tres jugadas del encuentro que pueden crear más
polémicas las comentamos a continuación:
En la primera parte se reclama un penalti de Godin a William
José. En mi opinión el contacto no es suficiente para señalar una infracción. Carga
legal del uruguayo que hace que William José caiga al césped. Es mi
interpretación, y aquí caben tantas interpretaciones como personas existan
opinando.
Min. 69. Los jugadores y la afición de la UD Las Palmas
reclama un fuera de juego de Griezmann en el segundo gol colchonero. En
directo, poco que decir; jugada al límite que puede ser o no fuera de juego.
Viendo varias veces la repetición en la tele sigo sin salir de dudas. Es una
vez y trazan la línea con el penúltimo defensor cuando se aprecia que esta en
posición legal. Jugada dificilísima para el asistente en la que acierta. No
obstante, gran parte del estadio de Gran Canaria canta el tradicional “Fuera,
fuera, fuera” y, en algunos casos: “manos arriba, esto es un atraco”. Todo esto
tras un acierto del arbitro asistente.
Además, quiero hacer hincapié en lo que he comentado la
semana pasada: cuatro de los cinco jugadores de Las Palmas que están más cerca
de Griezmann levantan la mano para pedir fuera de juego mientras el jugador
colchonero se dirige a la portería. El árbitro asistente no va a señalar el
fuera de juego porque levanten las manos o no. No pierdan tiempo de reacción en
ello, solo les perjudicará.
Min. 81. Se pide penalti por manos de un jugador colchonero.
Aquí nos encontramos con las famosas manos tras rebote de tu propio cuerpo tan
polémicas en España. En este caso, el balón golpea en la mano después de un
rebote en su cuerpo. Es cierto que los rebotes del balón del cuerpo a la mano
no se deben señalar como infracción, pero… ¿y si la mano se encuentra en una
posición antinatural ocupando un hueco que no debería? (Hablamos de posición
antinatural cuando una mano se encuentra en un lugar que no es propio del
movimiento que esta realizando el jugador con su cuerpo) En este caso, yo creo
que el jugador tiene las manos arriba frente a su cara, corriendo el riesgo de
que si el balón le golpea sea penalti. Por lo tanto, si dicho balón le golpea,
aunque sea tras un rebote, debe sancionarse penalti. Considero que se equivoca
Vicandi Garrido en esta decisión.
Personalmente, no me gusta las peculiaridades que tiene este
colegiado a la hora de sancionar las infracciones, con toques de silbato muy
largos y un abuso de gestos innecesarios y muy desagradables visualmente.
Pese a los dos posibles errores resaltados en este análisis,
consideramos que el arbitraje de Vicandi Garrido no ha sido determinante en el
resultado. Su actuación merece una nota de Regular.