El
gol de Rodrigo, tras fallo de Varas, -el delantero ché interceptó un pase del
portero a un defensa amarillo- parecía detonar el partido en el minuto 2. La
UD, que llegaba enrachada al encuentro, debía tratar de sobreponerse a un
marcador adverso, mientras el Valencia, un trasatlántico en una charca,
encallado y estrenando el tercer capitán en el curso, se encontraba, casi sin
sudar, con el tanteador a su favor. En
ese entorno, el equipo valenciano dominó el encuentro en el primer tramo, tras
el gol: bien plantados, presionando y provocando faltas tácticas, evitando que
jugase el triángulo donde se gesta el juego amarillo (Roque – Tana- Viera); si
bien la UD acabó quitándose los grilletes en los últimos 15 -20 minutos de la primera
parte, y, sin llegar a hacer jugadas claras de remate, sí transmitía cierta
sensación de peligro.
En
la segunda parte, aprovechando esa inercia última antes del receso la UD Las Palmas
continúa realizando su juego de posesión con Viera, Tana, Momo y Roque
combinando, encontrándose, sintiéndose más libres. Una combinación entre Viera
y Tana en el minuto 3 provocó un penalti de Javi Fuego sobre Tana. Viera,
retándose ante su excompañero, el brasileño Diego Alves, lo bate con
incertidumbre. Y, a partir de aquí; festival. Todo lo que vino a continuación,
macerado previamente, por supuesto, reflejó las inercias en las que ambos
equipos afrontaban el duelo. La UD encontró todos los huecos que el conjunto
ché supo controlar en la primera parte y Momo, Viera, Tana consiguieron
hilvanar jugadas de toda condición hasta que en el minuto 63 una combinación
amarilla acaba en un tiro de Momo que intercepta Alves y Aderlan Santos, tratando
de despejar golpea en Mustafi y entra.
Todo
lo que vino a continuación fue fiesta fuera y trabajo en el campo. El equipo
siguió demostrando la concentración y seriedad de la que hace gala últimamente
en un final en el que pudo caer algún gol más; teniendo ocasiones Sergio
Araujo, que entró por un lesionado Jonathan Viera.
Con
36 puntos, a 8 del Getafe y con un importante Levante – Sporting por jugarse, la UD da un
paso prácticamente definitivo en su lucha por la permanencia.