La UD necesitaba una buena noticia y este partido, una china en el zapato, molesta e incómoda, lo supuso. El once combinaba titulares y suplentes, combinaba a Raúl con Simón, Lemos, Bigas, Dani en línea defensiva, quienes podrían ser titulares perfectamente; con Vicente y Javi en la sala de máquinas y Momo, Viera, Tana, de delantero, y a un Vitolo estelar en la primera parte en la que dejó dos jugadas que explican por qué el pibe de San José es hoy en día un futbolista cotizadísimo e internacional por España. La primera, el primer gol, en el 7', fue una cabalgada como aquella en El Molinón, más corta esta, pero plena de calidad y que acabó, tras quebrar al defensa y al portero en el larguero. El rechace llegó a Vicente que cedió a Momo y marcó el de Las Torres, tras tocar en Tyton, portero deportivista.
El segundo, en el 16', tuvo en Vitolo, otra vez, a su estilete que aprovechó a un fallo defensivo del Depor para empezar un contraataque y ceder a Viera que llegaba en carrera y el de La Feria dio la pelota a Momo para que marcara a placer. Golazo rotundo del equipo.
Aún así, en el primer minuto, como un vaticinio de que el viento había cambiado, al menos hoy, el Deportivo de La Coruña mandó un balón al palo tras un chutazo de Schär en la que fue la única acción peligrosa de la primera parte para los locales.
Juanfran fue expulsado en el 24' por doble amarilla y el camino se allanaba para una UD que se mostraba seria, aseada y creando peligro en ataque mediante un Viera y un Tana que intercambiaban posiciones ocupando el puesto de falso delantero, no estando fijos sino ocupando ese espacio. Interesante esto. Igual aquí hay una altenativa interesante.
Vicente creaba y Javi achicaba los huecos. El equipo fluía en la mejor actuación del año, en el día, quizás, más inesperado, ante un rival que también está en plena reconstrucción con el nuevo míster, Cristóbal Parralo, acostumbrándose a su nuevo cargo.
La segunda parte arrancó con la UD algo cohibida; no se notaba en demasía que los amarillos contasen con un jugador más y en esta, un centro de Bakkali a Lucas Pérez en el 58', con Bigas no alcanzando a despejar el balón y Raúl, que realizó una mala salida, permitió que el equipo gallego redujese la ventaja y marcase el 1-2.
En el 71' salió Sergi Samper y mostró hechuras de jefe. Pidió el balón, inicio el juego, estuvo activo en una UD que ya no era tan dueña del partido. En la segunda parte fue más protagonista Raúl que Tyton y eso es noticia estando con uno más. Fede Valverde pudo marcar en dos ocasiones y Raúl estuvo fantástico.
Viera buscaba continuamente a Samper, Vitolo y Vicente también y el '6' amarillo frenó, con su cadencia impuesta en el juego, el ritmo del Depor y la tendencia del partido, más propensa al 2-2 que al 1-3. Fruto de esto una acción de Vitolo fue rematada por Calleri (que había entrado por Tana minutos antes) con toda la intención, pero Tyton estuvo rápido y detuvo el esférico. Un minuto después, Viera cede a Calleri que cruza el balón a la escuadra e hizo el 1-3.
Esa parsimonia amarilla, esa pausa impuesta por Samper y el acordeón que se abría cuando este disponía del esférico, dio pie a un pase entre líneas del debutante para Hernán Santana que cedió fantásticamente bien a Calleri que, en carrera, se adelantó a la defensa y a Tyton e hizo el 1-4.
La Copa sirve para cerrar una herida cuando más falta hacía, pero la batalla de verdad vendrá este lunes ante este mismo Deportivo. Será otra historia, seguro. Urge ganar mañana. Muy bien hoy.
Fotos: udlaspalmas.es