La joya de la cadena de filiales no está disfrutando de su regreso a la categoría que está siendo una auténtica pesadilla.. Su devenir hasta ahora está siendo una larga y dolorosa agonía. Anclado en el farolillo rojo del grupo, los pequeños brotes verdes que en ocasiones se atisban, a la siguiente jornada mueren marchitos.
El Murcia es el primer equipo que marcaba la distancia con la salvación, exactamente 7 puntos, y los pupilos de Suso Hernández, tras su buena actuación ante el Cartagena el pasado domingo, se mostraban confiados en seguir con la senda de la recuperación logrando su primera victoria tras casi 2 meses sin lograrlo.
No obstante, llámelo suerte, azar o fortuna, llámelo como quiera, pero los musas, los hadas, duendes y medio santoral, le ha dado la espalda a este equipo que parece gafado. No se había llegado al minuto 10 y ya la desgracia se estaba digiriendo en la grada. Un balón blando sobre el arco, al que Josep, que saltó sin problemas, se le acabó escapando al guardameta de sus guantes en el aire para terminar acabando en las botas del delantero pimentonero Juanra que tan sólo tuvo que empujarla sobre la línea (0-1). Un castigo severo para un equipo tocado en lo anímico.
El Real Murcia celebra el único gol del partido. Foto: ©GradaCurva.com |
A partir de ese minuto todo el encuentro fue una cuesta arriba más dura que la de Sísifo y su roca. Ante un equipo experimentado como el Murcia, el rival puso corazón y alma en la lograr primero el empate y luego la remontada. Pero pronto se pudo comprobar que la tarea sería, cuanto menos, titánica ante un equipo muy experimentado y que sin miramientos se parapetó en su campo y esperaba al filial.
El filial no supo cómo superar la muralla roja de los visitantes, sin ideas abusó del juego horizontal con largas posesiones estériles sin profundidad ni velocidad y casi siempre en traslados horizontales que rara vez superaba los tres cuartos de cancha. La impotencia se hacía material en los rostros de la vela chica. Sí, los amarillos disfrutaron de alguna ocasión pero siempre aislada y que no superaba la categoría de susto, pero jamás una ocasión manifiesta de gol.
El once titular que propuso Suso Hdez. Foto: ©GradaCurva.com |
El Murcia aguantó el regalo con el que se encontró como si fuera el anillo único para llevarse los tres puntos que le ayudan a alejarse del descenso. El planteamiento rocoso, excesivamente exagerado en los choques cuando los jugadores murcianos se tiraban por el suelo de forma teatral, exasperó a los jugadores y público locales.
Por su parte el filial sale de esta partido nuevamente tocado, consciente que la salvación se aleja un poco más. Viendo las cosas con talante positivo, en cuatro días, el próximo domingo, tienen una nueva ocasión para intentar reaccionar. No hay tiempo para lamentarse.