Segunda victoria consecutiva del equipo formativo amarillo que le sirve para abandonar el puesto de promoción por la permanencia y poner tierra de por medio con el descenso directo que se queda a una distancia de seis puntos que marca el Rápido de Bouzas, su próximo rival.
Los tres puntos ganados esta mañana se explican desde el trabajo colectivo y la resolución individual de Carlos González que, con una pequeña joya, decidió el encuentro. El equipo de Juan Manuel Rodríguez volvió a encontrarse con su mejor versión, la de un equipo trabajado tácticamente, serio atrás, generoso en el esfuezo y que permite en 3/4 de cancha el verso libre a sus jugadores más talentosos. Eso es lo que sucedió casi a la media hora de partido cuando por el carril de diez emergió la menuda figura de Carlos González para ejecturar un slalom prodigioso mientras se iba deshaciendo de rivales, hasta 3, para plantarse a toda velocidad ante el arquero rival y con sangre fría definir con calma a un lado (1-0, minuto 28).
El resto del encuentro careció de acierto en las contadas oportunidades que se dispusieron, alguna de Espiau o Cedrés, todas ellas falladas sin excesivo acierto goleador. La medular amarilla entendión que en ella se debía fraguar la victoria e hizo moverse a la pelota con criterio por toda la cancha, evitando así posibles contras gallegas y buscando algún resquicio en la defensa rival que permitiera rematar el partido. De los gallegos en ataque sólo se supo en la segunda parte, cuando Vallés tuvo que emplearse a fondo cuando el Coruxo estiró líneas buscando la igualada. Este pasito hacia adelante del equipo blanquiverde dio espacio a las contras amarillas pero no se estuvo fino de cara a puerta.
Con este empate el equipo insular refuerza su posición y confianza de cara al trascendental partido de la próxima jornada ante el Rapido de Bouzas, equipo que se encuentra a 6 unidades de distancia en la tabla y es quien abre los puestos de descenso. Una victoria la próxima jornada en tierras gallegas sería casi una sentencia definitiva de alejarse del descens directo.